Seguno partido de pretemporada: Espanyol 4, Swansea 0

Segundo partido, segunda victoria, segunda goleada y primer trofeo, aunque de 'mentira'.

El partido ayer empezó con C. Álvarez, Chica, De la Peña, Luis García, Callejón, Coro, Jarque, Moisés, Tamudo, Víctor Ruiz y Dídac y con un buen ritmo los primeros 15 minutos, donde se dispuso de una buena ocasión por parte de Tamudo en una vaselina tras un pase de De la Peña que el portero envió a córner.

Poco a poco el conjunto galés se iba haciendo hueco en el juego y empezaba a crear sus ocasiones, aunque Cristian se le notó seguro el rato que estuvo en el terreno de juego. Al imprecisos sí que estuvieron los defensas, pero hay que tener en cuenta que la mitad de ellos eran del juvenil.

No fue hasta el minuto casi 40 cuando Luis botaba una falta y Tamudo la cabeceaba al fondo de la red. Primer golito de Tamudo.

La verdad es que la primera parte fue bastante apagada, quitando los primeros 15 minutos. Vi a un Callejón que lo intentaba pero no podía y un De la Peña, quitando el pase a Tamudo, bastante torpe con la pelota. Moisés muy faltón y la defensa un poco imprecisa.

La segunda parte empezó como acabó la segunda: sin dominio claro del balón. El equipo esta vez lo formaban Javi Ruiz, Valdo, Lacruz, Torrejón, Beranger, Sielva, Ángel, Riera, Julián, Rufete y Jonathan, aunque mediada la parte Ángel tuvo que retirarse por un golpe y volver a entrar Víctor Ruiz en su lugar.

En esta ocasión el segundo gol fue obra de Jonathan Soriano y llegó en el minuto 20, tras un barullo en el área y haciendo una buena jugada. Esto no hizo más que hacer que el Swansea entrase un poco más en el partido, pero sin fortuna. Su chute más peligroso fue una pérdida nuestra en un pase hacia nadie que controló el delantero y tras la salida de Javi Ruiz no pudo acertar entre los tres palos.

Pero lo mejor estaba por llegar, y de la mano de Riera. En el minuto 30 Riera se llevaba la pelota de tacón por alto y metía el tercero de tacón por bajo, todo esto después de una enorme jugada de Rufete que es quien le centra el balón. Un golazo, vamos. Y es que de Riera nadie discute sus habilidades. De él se discute la forma de ser, pasota. Y después de lo que dijo, pues con más razón. Aunque parece que parte de la afición le ha perdonado porque aplaudió el cuarto gol del partido y el segundo suyo a falta de 3 minutos para el final. Un pase de tacón de Jonathan le hacía correr para que cruzara el balón al palo largo.

Creo que se jugó un poco mejor la segunda parte. Menos imprecisiones y un poco de más juego. De Beranger lo vi nervioso aunque bien es cierto que cuando perdía la pelota corría como un poseso a recuperarla. Para mi, los mejores Riera, Jonathan y Rufete y buen papel del chaval, tocayo, Óscar Sielva, que realizó una buena labor en el medio del campo.

En líneas generales se dió más o menos buena imagen, pero está claro que hay cosas que pulir. Una de ellas el sistema 4-3-3, que todavía no estamos bien adaptados. Contra el Manchester tenemos la ocasión de demostrar que podemos dar más de sí. Posiblemente no se gane, es obvio, pero eso no quita de dar buena imagen.