No se puede fallar eso, Luis: Espanyol 1 Zaragoza 1

Hace ya semanas que no comento nada del partido, o si lo hago es poca cosa. Y hoy no va a ser menos. Y no es por vagancia, como se pueda creer. Es que simplemente, de nuestro juego no hay mucho que comentar. Tan sólo destacar jugadas así un poco vistosas, ocasiones falladas, grandes paradas... pero lo que es de juego, nada de nada.

Y nos volvió a pasar ayer de nuevo. Algunos ven mejoría en el juego. Yo, en cambio, veo la misma cantinela que llevamos viendo toda esta segunda vuelta. Por destacar, ni siquiera podemos decir que el gol de Riera fue un gran chute, ya que fue todo lo contrario: un mal centro que se tragó César. Al fin y al cabo, gol, sí.

Y la única ocasión trenzada, podemos decir incluso en jornadas, es la única que fallamos. Y de forma increíble: un centro de Rufete que llegaba al pie izquierdo de Luís, que tan sólo la tenía que empujar hacia adentro, sin portero ni nadie molestando, se perdía inexplicablemente por la línea de fondo.

Lo que está claro es que, salvo milagro, Europa la podemos ir sintonizando por la televisión (o podemos ir al barrio de Gracia), porque lo que es jugarla, pues, sinceramente, y desde mi punto de vista, va a ser que no.

Pero bueno, ahí estaremos el jueves ante el Atlético (este no, el próximo), ya que el chip me impide quedarme en casa a pesar de todos los pesares que estamos sufriendo.